119.
MARGARIDA XIRGU: EL TEATRO DE AFICIONADOS Y BADALONA
El
primer papel de Margarita Xirgu fue a los 11 años, en 1899, con un grupo
de aficionados y de niña 3ª en la obra "La muerte civil"
de Paolo Giacometti, en la sociedad recreativa cultural "El Niu Guerrer"
de Barcelona, y debió ponerse talones altos para parecer más grande
de lo que realmente era. Margarita debutó oficialmente en el teatro de
aficionados a la edad de 14 años, en 1902, en el Salón Asiático
de Barcelona con el drama en tres actos y en verso "El novio" de Josep
Feliu Codina.
A primeros de 1903 Margarita Xirgu actuó en "Don
Álvaro o la fuerza del sino" de Ángel de Saavedra, Duque de
Rivas, en el Ateneo del distrito quinto de Barcelona. En este año cuando
sólo tenía 15 años, su dedicación vocacional por el
teatro hizo un paso adelante decisivo al empezar a actuar, como intérprete
de refuerzo, con "Gent Nova" de Badalona, un elenco constituido a partir
de la Agrupación Patria y Arte del Centro Catalanista (adherido a la Unión
Catalanista). En el local de "Gent Nova", que estaba situado en la calle
del Canonge Baranera, esquina con la calle de Sant Francesc, unos jóvenes
aficionados representaban, en el pequeño teatro, obras de toda clase. Trabajar
en Badalona, le resultaba un martirio. Debía cenar deprisa para no perder
el tranvía de ida y había de acabar rápidamente los ensayos
para no perder el de regreso. Vida triste, mezquina, casi sórdida! Todo
lo olvidaba cuando se levantaba el telón y las luces del escenario, la
iluminaban. En aquellos momentos la vida le parecía bella y se sentía
feliz. Cuando Margarita Xirgu empezó a colaborar con "Gent Nova"
hacía poco que este elenco había iniciado su singladura. Fue el
6 de marzo de 1904, el programa incluía como era habitual, dos obras: "La
recluida" de Ignasi Iglesias y "La alegría que pasa" de
Santiago Rusiñol. Antes de que colaborara con ellos la joven Xirgu, la
compañía de aficionados había incorporado en su repertorio
obras de autores catalanes como por ejemplo Frederic Soler, Josep M. Arnau, Àngel
Guimerà, Ignasi Iglesias, Santiago Rusiñol, Albert Llanas, Adrià
Gual o Josep Pous Pagès, como también excepcionalmente, algún
dramaturgo extranjero, como Henrik Ibsen con "Espectros", que incluso
llevaron a Barcelona. En poco tiempo, "Gent Nova" se convirtió
en una compañía de referencia para el teatro amateur catalán,
que bien poco podía pensar, en aquellos momentos, que acogía una
adolescente que se convertiría, años después, en la actriz
catalana más universal.
Trabajó paralelamente en diferentes
sociedades de aficionados cómo: los Ateneos del distrito segundo y del
distrito quinto, el Ateneo de la izquierda del ensanche, el Círculo de
Propietarios de Gracia,... El 28 de junio de 1905 Margarita interpretó
en el Ateneo Obrero del distrito segundo -en la calle Mercaders, 38- tres obras
de autores catalanes: el drama en un acto "Juventud" de Ignasi Iglesias,
con el siguiente reparto: Ció (Srta. Xirgu), Rita (Sra. Vidal), Lari (Sr.
Furquet), Cebrià (Sr. Vilallonga), Meleior (Sr. Castelló), Isidre
(Sr. Solà) y Vicens (Sr. Creus); el drama en tres actos "Padre Janot"
de Àngel Guimerà con el siguiente reparto: Rosó (Srta. Xirgu),
Teresona (Sra. Cervera), Paula (Sra. Vidal), Climenta (Srta. Venancio), Felipa
(Srta. Virgili), Pascuala (Srta. Roca), Mossen Janot (Sr. Guildo), Toni (Sr. Furquet),
Lorensó (Sr. Castelló), Jordi (Sr. Solà), Hilari (Sr. Vilallonga),
Lluch (Sr. Creus), Silvestre (Sr. Gelabert) y Matias (Sr. Torrens); y un diálogo
de Antoni Ferrer Codina "Un golpe de telas", en el que actuó
con Josep Arnall, quien en septiembre de 1910 sería su primer marido. El
1 de noviembre de 1905, fiesta de Todos los Santos, actuó con "Gent
Nova", el programa incluía: "El patio azul" de Santiago
Rusiñol, la más importante y El "himno de Riego" de Pau
Parellada, como complemento de la velada. La prensa badalonesa no destacó
todavía la joven actriz del conjunto: su nombre aparecía junto a
otros intérpretes venidos de Barcelona, para fortalecer la nómina
del elenco de aficionados badaloneses.

Programa
del 28 de junio de 1905.
Foto Fondo Antonina
Rodrigo
La incorporación
de intérpretes provenientes de Barcelona, que en los anuncios de las representaciones
eran especialmente destacados, denotaba que la compañía amateur
badalonesa había conseguido, con la dirección de Joaquim Casas,
un cierto prestigio entre los elencos de aficionados. Otras fuentes apuntan que
en Badalona, por aquel entonces, había mucha afición al teatro y
que los actores badalonenses cuando ponían una obra en escena, se veían
obligados a hacer venir de Barcelona, una actriz aficionada o profesional, pues
se daba el caso que las familias de Badalona, por pobres que fueran, no permitían
a las chicas que actuaran con los actores locales. Tal y como apuntaba Jordi Català
en las páginas del semanario "Gent Nova" del 17 de marzo de 1906,
tras dos temporadas, el cuadro dramático de la Agrupación Patria
y Arte ya era una realidad consolidada: no unicamente integraba jóvenes
<<de voluntad consciente y de un conocimiento artístico envidiable>>,
sino que había dado muestras de su valía, escenificando "La
madre eterna" y "Juventud" de Iglesias, "El patio azul"
de Rusiñol, "Misterio de dolor" de Gual, "La muerta"
de Pompeu Crehuet, o "Espectros" de Ibsen. No eran, por lo tanto, simples
aficionados: podían merecer el grado de <<enamorados del arte teatral
de nuestra tierra>>, como manifestaba dichosamente Jordi Català.
Durante los primeros meses de 1906, Margarita Xirgu tomó parte también
en algunas de las sesiones de "Gent Nova", celebradas generalmente el
domingo por la tarde, en las cuales a menudo se combinaba una obra principal con
otra más breve y de carácter cómico: "¡Mal padre!"
de Josep Roca Roca, y "Las bodas de Cirilo" de Emili Vilanova, el 6
de enero; "El pleito de Baldomero" también de Roca Roca y El
"carro del vino" de Ramon Ramon Vidales, el 21 de enero -en qué
ya empezó a tener un trato especial como "señorita Xirgu"-
o "Toreros de invierno" y "Gallina vieja hace buen caldo"
las dos de Antoni Ferrer Codina, el 18 de febrero. No debía de hacer ningún
papel lo suficientemente relevante, porque la crítica local no le dedicó
ni una línea. Aun así, era bien revelador que Margarita Xirgu hubiera
sido reclamada por una compañía de aficionados que cada vez tomaba
más vuelo. Cuando menos, quería decir que había adquirido
un renombre en la escena amateur barcelonesa.
La joven actriz tuvo su primera
actuación destacada dentro de la agrupación "Gent Nova"
en la obra "Tristes amores" de Giuseppe Giacosa, que se estrenó
el 19 de marzo, día de san José, de 1906, en el Centro Catalanista
badalonés, en una traducción de Miquel Balmas. Margarita hizo el
papel de Emma, la mujer que, dolorosamente, sacrifica su gran amor por la hija
amada. De la representación, el crítico de "Gent Nova",
Jordi Català, infirió que <<la señorita Xirgu fue la
artista de siempre en el final del segundo y todo el tercer acto>>, mientras
que en las postrimerías de la obra <<estuvo sublime>>.
Los comienzos, de hecho, no fueron fáciles. Cuando Margarita Xirgu volvió
a colaborar con "Gent Nova", en el marco de unas veladas teatrales que
esta compañía hacía en el Teatro Español de Badalona,
su interpretación de "El patio azul" de Rusiñol, el 2
de junio de 1906, no convenció demasiado a la crítica local, que
remarcó que <<la señorita Xirgu no lo hizo todo lo bien que
la primera vez, y sobre todo en el primer acto abusó de ingenuidad>>.
Pocos días después, el 9 de junio, participó en el reparto
de "El día después de la boda" de Josep Pous Pagès,
en la cual interpretó su papel <<con cariño>> según
"Gent Nova". En cambio, en "El novio" de Feliu Codina, representada
el 14 de junio, Margarita Xirgu sobresalió entre las actrices y tuvo <<momentos
felices>> ("Gent Nova"). A primeros de julio, junto con el actor
aficionado badalonés Josep Terrades, cooperó también en la
representación de "Maria Rosa" de Guimerà, en el Centro
de la Unión Republicana, en beneficio de un obrero denominado Cardús.
En septiembre de 1906 actuó en "Maria del Carme" de Josep Feliu
Codina en el teatro de aficionados de la calle Santa Rosa de Barcelona.

Margarita Xirgu actuando de muy jovencita.
Foto Mundo Ibérico de Màrius Verdaguer
Casi
de manera imperceptible, Margarita Xirgu fue tomando posición en sus actuaciones
con "Gent Nova" durante la temporada 1906-1907. El 30 de septiembre,
colaboró en la reposición de "Batalla de reinas" de Frederic
Soler, que inauguró la nueva temporada teatral de la sección dramática
del centro catalanista badalonés. La <<distinguida actriz>>,
tal y como se le denominaba ya en la prensa local, obtuvo un éxito notable.

Margarida
Xirgu actuant amb la formació "Gent Nova" de Badalona.
El
4 de octubre de 1906 estrenó "Teresa Raquin" de Émile
Zola traducida por Juli Vallmitjana y Rafael Moragas, en el Círculo de
Propietarios de Gracia. "Teresa Raquin" fue el personaje con el que
Margarita entró por la puerta grande de la escena.
El 11 de noviembre,
Margarita Xirgu participó en el estreno de "Dentro la jaula"
de Emili Tintorer y Frederic Pujulà Vallès, y en la representación
de "La prima de la Lola" de Francesc Xavier Godó, completadas
con "La teta gallinacea" de Francesc Camprodon y "Sirena"
de Apel·les Mestres. La prensa local se referió a <<la aplaudida>>
o a <<la notable actriz señorita Xirgu>>. La joven intérprete
se hizo notar también en la interpretación <<excelente>>
de "Girasol" de Ignasi Iglesias, el 9 de diciembre; al día siguiente
de haber debutado profesionalmente en el Teatro Romea con la obra de Ángel
Guimerà "Mar y Cielo". Días más tarde, el 14 de
diciembre, actuó en la obra de Adrià Gual "Los pobres menestrales".
También en el Teatro Romea, representó obras del repertorio de la
compañía y algunos estrenos como "La ciudadana cigala"
de P. Marqués y "De Barcelona a Arenys" de Pau Parellada.
Tras su incorporación al Teatro Romea, la presencia de Margarita Xirgu
en los repartos de "Gent Nova" se hizo cada vez más espaciada
hasta limitarse a funciones muy excepcionales. Desde entonces Margarita colaboró
como actriz profesional de refuerzo, de vez en cuando, con sociedades recreativas,
como con "Gent Nova": el 3 de marzo de 1907 en "Corazón
de Àngel" de Ramon Suriñach o el 21 de julio de 1907 en "Otelo"
de William Shakespeare y la comedieta "¡Mala noche!" de Josep
Pous Pagès, en la función extraordinaria en el Teatro Español
de Badalona.
Posteriormente, cuando ya era una de las actrices más
prometedoras de la escena catalana, Margarita Xirgu volvió a Badalona sobre
todo durante las tournées de verano o en efemérides especiales.
Como integrante de la compañía del Teatro Principal de Barcelona,
dirigida por Enric Giménez, volvió a la ciudad de cerca del mar
en verano de 1909, en qué llevó al Teatro Zorrilla "Los mentirosos",
el 3 de junio, y Los "hipócritas", el 28 de julio, las dos de
Henry Arthur Jones. La prensa badalonesa no dejó de subrayar que la compañía
era integrada por <<la inteligente actriz, tan admirada de nuestro público,
la Margarita Xirgu>> ("Gent Nova").

Retrato
de Margarita Xirgu.
Foto Archivo Museo de Badalona
En la fiesta de homenaje a Àngel Guimerà que tuvo lugar en Badalona,
el primer día de la Fiesta Mayor de verano, el 14 de agosto de 1910, Margarita
protagonizó "El hijo del rey", secundada por los actores aficionados
badaloneses Josep Terradas y Joaquim Casas, en el Teatro Zorrilla. Al final del
tercer acto, Guimerà se vio obligado a salir al escenario de la mano de
la Xirgu. Los espectadores aplaudieran, de pie, en medio de un entusiasmo grandioso.
Guimerà tuvo que salir hasta seis veces consecutivas, reclamado por la
ovación unánime del público badalonés, tal y como
explicaba gráficamente "Gent Nova". Margarita Xirgu volvió
al Zorrilla de Badalona, el 12 de julio de 1911 con la compañía
que encabezaba con Enric Giménez. Interpretó "Los zin-calós"
de Juli Vallmitjana y "La reina joven" de Guimerà, dos de los
éxitos de la temporada 1910-1911 del Teatro Principal de Barcelona. En
el papel de la reina Aléxia, la Xirgu se distinguió sobre todo cuando
interpretaba <<exquisitas escenas de naturalidad e ingenuidad>> ("Sol
Ixent"). La actriz había hecho gala de los dotes excelentes de qué
disfrutaba por <<brillar como astro de primera magnitud en la escena de
nuestro teatro catalán, ya que su temperamento artístico, de identificación
del personaje que debe encarnar, la hacen sentir, y en lógica consecuencia
vivir, la realidad de lo que llevó a la escena el poeta. Hizo una "Alèxia"
deliciosa, imprimiendo al tipo toda la fuerza escénica necesaria>>
("El Eco de Badalona")

Margarita Xirgu protagonizando "La reina jove"
de Àngel Guimerà.
Foto
Archivo Fotográfico de Barcelona
El
10 de julio de 1912, Margarita Xirgu actuó nuevamente en Badalona, esta
vez con "La dama de las camélias" de Alexandre Dumas, en la Sala
Picarol, y volvió a convencer y a entusiasmar a los espectadores badaloneses.
La crítica local remarcó su excelente interpretación en <<su
amatorio papel>> ("El Eco de Badalona"). Ahora bien, la presencia
de la Xirgu dejó un sentimiento agridulce de despedida, puesto que era
de dominio público que la actriz catalana preparaba el primer viaje a América,
para representar teatro castellano, una decisión personal que no admitía
ningún comentario al margen: <<A una artista no se la puede declarar
monumento nacional y obligarla a quedarse perpetuamente entre nosotros>>,
sentenciaba, magnánimo, el crítico de "Gent Nova".
Companyia Dramática Catalana del Teatre
Principal, temporada 1911-1912.
Foto Escena
Catalana

Retrato
de Margarita Xirgu en la revista "Feminal" del 26 de enero de 1913.
Foto "Feminal".
Cuando
ya era una actriz de primera categoría en la escena española, la
Xirgu visitó inesperadamente Badalona, el 17 de julio de 1918, para participar,
en el Teatro Picarol, en una función organizada por la compañía
Josep Terradas-Joaquim Casas, dos de sus compañeros de juventud en su carrera
artística como amateur. Pero cada vez, sus actuaciones en la ciudad serían
más espaciadas. Con la Compañía Xirgu-Borràs, Margarita
ofreció, el 5 de julio de 1920, en el mismo Picarol "El adversario"
de Alfred Capus, en una función en beneficio de la Junta de Protección
a la niñez y extinción de la recaudación pública.
El resultado benéfico -la entrada y la butaca a 3 pesetas; la general,
a 60 céntimos- fue la cantidad de 1.107,30 pesetas, incluidas las 700 cedidas
por Borràs, correspondientes a los honorarios de la función.

Retrato de Margarita Xirgu.
Foto
"Margarida Xirgu, cartografia d'un mite. De Badalona a Punta Ballena"
de Francesc Foguet.
<<Mis alabanzas hacia esta ciudad
tan hermosa serían pocas. Y además de la ciudad, me complace también
el carácter tan franco y sencillo de su gente>>, confesó Margarita
Xirgu a Josep Arimont Boix en una entrevista publicada en "Joventut"
el 20 de septiembre de 1924. Margarita Xirgu compró una casa en Badalona
en la calle Santa Madrona nº 118 cerca del mar, el 17 de noviembre de 1922.
Era una casa de pescadores frente a la vía del tren y de la playa. Más
tarde el 29 de julio de 1924 también compró una casa en la calle
Santa Maria nº 124 y unió las dos casas, pues una está a continuación
de la otra, tomando la casa final la longitud de 40 m de una calle a la otra,
por una anchura de 5 m aproximadamente. Las casas fueron compradas para que su
madre Pepeta Xirgu Polls mejorara de salud, pues Barcelona, donde vivía,
era poco recomendable para ella. Además si vivían su madre y su
hermano Miquel con su familia, cuando hiciera temporada de teatro en Barcelona
-dado que Badalona está cerca, a 15 km de la ciudad- podría alojarse
y sería más cómodo en lugar de ir a un hotel en Barcelona
y por añadidura se encontraría en familia. En principio la casa
de delante del mar seria para la Xirgu, su marido Josep Arnall y sus huéspedes
y la de atrás para su familia. Así es como el 28 de agosto de 1925
se empadronó en la calle Santa Madrona 118, de Badalona, se dio baja del
padrón de habitantes de Barcelona y alternó la estancia en esta
casa con la del piso del número 86, principal 2ª, 1ª puerta,
de la calle Bailén que tenía alquilado en Barcelona, también
para ella y su familia.
Así pues el censo badalonés
de 1925, se consignó que Margarita Xirgu compartía la casa de la
calle Santa Madrona con su marido, Josep Arnall y Melero, que tenía la
misma edad que ella, y buena parte de la familia Xirgu: la madre viuda, Pepita
Subirà Piojos de 57 años, su hermano Miguel, de 33, la mujer de
este, Pepita Rico y Mingarro, valenciana de Alberique, de 28, y los hijos de ambos:
Margarita, de 12 años; Salvador , de 8, y Roser de uno.
El 30 de junio de 1927, Margarita Xirgu volvió a Badalona presentando "La
ermita, la fuente y el río" de Eduardo Marquina en el Teatro Guimerà,
a beneficio de las obras de la Casa de Amparo. La revista "Joventut"
indicó que la obra triunfaba diariamente en el Teatro Goya de Barcelona
y que había merecido los elogios unánimes de la crítica y
del público. A parecer de "Joventut", ningún badalonés
amante del teatro podía dejar de asistir, pues, al Guimerà <<para
rendir tributo al arte, a la belleza y al gesto de Margarita Xirgu, que quiere
demostrar el cariño y la simpatía que siente por nuestra ciudad,
contribuyendo con su trabajo inimitable a las obras de la Casa de Amparo, hogar
de los viejecitos desvalidos>>.

Margarita Xirgu en la playa de Badalona, en 1930.
Foto
Archivo Museo de Badalona

Foto de Josep Gaspar
El
domingo 22 de octubre de 1933, Margarita Xirgu a instancias de Enric Borràs
fue proclamada hija adoptiva por la corporación municipal de Badalona.
En el salón de Sesiones del Ayuntamiento, atestado, tuvo lugar el acto,
en el que también se libraron a Margarita y a Enric Borràs la Medalla
de la Ciudad. Presidió la sesión, el alcalde Josep Casas y Costa,
que estuvo acompañado, en la mesa presidencial, por Mariano Solá,
teniente de la Guardia Civil y Pere Sánchez, en representación del
Sometent. Entre el público había la mayoría de los concejales
del Ayuntamiento, el maestro Pompeu Fabra, las personalidades locales más
conspicuas y los representantes de las entidades badalonesas. Durante los parlamentos,
Borràs agradeció el homenaje que le habían dispensado los
conciudadanos y declaró que la distinción concedida a la Xirgu era
una de las alegrias más grandes de su vida, porque honoraba a los badaloneses
y a los catalanes: <<Ella es la actriz más moderna en el más
amplio sentido de la palabra; la intérprete genial por naturaleza y por
educación; la de los matices sentimentales más sutiles>> ("Sol
Ixent"). Profundamente emocionada, Margarita Xirgu dió las gracias
de todo corazón por el nombramiento de hija adoptiva, dijo -glosando los
versos de "El emigrante"- que su anhelo era morir en la ciudad que tanto
le quería y aseguró que lo que le complacía todavía
más, era comprobar que el pueblo catalán, con su cordura tradicional,
sabía comprender y valorar el arte, un mérito que se sentía
orgullosa de proclamar por todas partes. Antes del ágape de homenaje, Margarita
Xirgu y Enric Borràs visitaron el estudio de la nueva emisora Radio Badalona,
desde la cual dirigieron unas palabras de saludo a los radioyentes de la ciudad.
Borràs recitó la fábula "El herrero de corte" de
Frederic Soler, mientras que Margarita, con gran dominio y sentimiento, recitó
el poema "El hilador de oro" de Jacinto Verdaguer. El banquete se celebró
en el restaurante Miramar, con la asistencia de unos 125 comensales. Cuando llegaron
los brindis, Borràs remarcó que el pueblo catalán sabía
escoger los hijos que, que aun juntando los sentimientos, lo pregonaban por todas
partes con su arte. Como corolario del homenaje, el miércoles 25 de octubre,
tuvo lugar una gran función de gala en el Teatro Zorrilla, que se llenó
a rebosar, hasta el punto que algunos badaloneses se quedaron en la calle. Los
dos artistas interpretaron los personajes de Rosa y Marçal de "Maria
Rosa" de Àngel Guimerà, acompañados de los actores de
la Compañía Terradas-Casas, instigadadora con Borràs del
homenaje oficial. El reparto de acompañantes fue: Tomasa (Sra. Masriera),
Quirse (Amadeu Mateu), Gepa (J. Clapés), Badori (Camil Costa), Calau (Manel
Dalmau) y Xic (Luís Company). Naturalmente, la prensa badalonesa se felicitó
por el hecho de que, casi treinta años atrás, la entidad "Gent
Nova" hubiera convivido horas felicísimas con una aficionada jovencita
que ahora volvía a la ciudad como <<la mejor actriz española>>.
La concesión de la Medalla de la Ciudad a Margarita Xirgu y Enric Borràs
demostraba, como reconocía "El Eco de Badalona", que el consistorio
había hecho justicia, todo interpretando <<el sentido unánime
de la ciudad>>: el nombramiento de la actriz como hija adoptiva -al mismo
tiempo que era considerado Pompeu Fabra, el ordenador de la lengua catalana- evidenciaba
también la satisfacción que sentían, en calidad de badaloneses,
por poder tener como conciudadana <<esta eminente artista que se inició
su formación en nuestra casa y que ha escalado las cumbres de la escena
catalana y española>>. Desde las mismas páginas del semanario
"El Eco de Badalona", el poeta local Vicenç Dauder dedicó
un poema a los dos actores que llevaba por título "A Margarita Xirgu
y Enric Borràs" y que empezaba con estos entonados versos:
<<Dama
Margarida, cavaller Enric
Superba Medea, genial Manelic,
Fills d'aquesta
noble terra catalana
sou els emissaris del nostre esperit>>

Programa del homenaje Xirgu-Borràs.
Foto
Museo de Badalona
Cuando la Xirgu y Borràs todavía
hacían tándem artístico, el 20 de junio de 1934, los dos
actores participaron en la sesión extraordinaria organizada por la Asociación
de la Prensa de Badalona, en qué se representó "Samuel"
de Josep Navarro Costabella, por la Compañía de Enric Lluelles,
en el Teatro Zorrilla. Acompañada de Borràs, Margarita leyó
poemas de Ignasi Iglesias ("El manzano viejo" y "Los leñadores"),
de Joan Maragall ("La sardana") y de Frederic Soler ("La balada
del herrero de corte"). Su presencia endomingaba todavía más
la fiesta de la prensa, uno de los acontecimientos artísticos más
remarcables de la ciudad. Los entreactos fueron amenizados por el Quinteto Badalona,
que acompañó a Raquel Meller en el recital de canciones; la sala
fue perfumada por la casa Ariel, y el vestíbulo disfrutó de los
adornos de la jardinería Tramunts.
Un mes más
tarde, el 17 de julio de 1934, la Compañía Xirgu-Borràs,
volvió a Badalona para reponer "El herrero de corte" de Frederic
Soler, en la segunda sesión de los Amigos del Teatro de Badalona celebrada
en el Zorrilla. La crítica badalonesa se mostró unánimemente
elogiosa con su hija adoptiva: <<Margarita Xirgu estuvo como nunca, desempeñando
el rol de la baronesa, hizo una creación inigualable>> ("Sol
Ixent"); <<lo que más sobresalió de la ejecución
de la obra, fue Margarita Xirgu en la interpretación de la baronesa, dónde
nos mostró las grandes cualidades artísticas que posee>> ("Amunt");
<<Margarita Xirgu dio un relieve y una vigorosidad extraordinaria al papel
de baronesa, lleno de vida, haciendo vibrar de emoción delante de su arte
inimitable>> ("El Eco de Badalona").
Como
resultado de los hechos de octubre de 1934, después de que el Presidente
Companys proclamara la República Catalana el 6 de octubre y en los que
el gobernador militar, el general Batet, se negó a acatar las órdenes
de la Generalitat y con sus tropas sofocó la intentona catalanista; Manuel
Azaña que se encontraba en Barcelona fue detenido al día siguiente,
acusado de complicidad con el golpe revolucionario y fue encarcelado en el puerto
de Barcelona junto con el exministro y amigo suyo Santiago Casares Quiroga, en
los barcos de guerra Cádiz y Sánchez Barcáiztegui; Margarita
Xirgu ofreció su casa de la calle Santa Madrona de Badalona, para que pudieran
hospedarse durante una temporada, las dos amigas ilustres que tenían los
maridos encarcelados: Dolores de Rivas Cherif, la esposa de Azaña y hermana
de Cipriano en aquellos momentos director artístico de la Compañía
Xirgu-Borràs, y Gloria Pérez, la mujer de Casares Quiroga. Margarita
también brindó a Cipriano su casa, para que hiciera una estancia,
mientras era objeto de las invenciones de la derecha más integrista. Cuando
fueron liberados Casares Quiroga y Azaña, el 28 de diciembre de 1934, también
se hospedaron unos días en dicha casa, para descansar antes de emprender
el regreso a Madrid. A Azaña, uno de los artífices más significantes
de la República, los pescadores badaloneses le enviaban cestos llenos de
pescado escogido y, a su mujer, le enviaban anónimamente ramos de flores.
Los amigos y los simpatizantes de fuera le remitían obsequios y, los días
de fiesta, la casa era el centro de una inacabable procesión de visitantes,
algunos de los cuales querían comprobar in situ si aquel era el hombre
feroz que algunos querían hacer creer. No había ninguna intencionalidad
política en la acogida que dispensó Margarita Xirgu a sus amigos
Lola, Gloria, Cipriano, Santiago y Manuel, sino una sincera muestra de hospitalidad
que, con malicia, los sectores de extrema derecha tuvieron por un <<delito
político>>. En el caso de Azaña, por el cual Margarita mostraba
una veneración indecible, aun cuando habían coincidido en el teatro
y se invitaban de vez en cuando a comer juntos, pasó un hecho curioso al
producirse el movimiento revolucionario. La misma noche de la detención
de Azaña, el 7 de octubre, y sin que llegaran todavía las noticias
de la revuelta de Barcelona, la Xirgu se despertó de pronto, muy afectada
y nerviosa, en la habitación del hotel de Zaragoza dónde se encontraba,
y pidió a su marido que avisara a quien fuera para que auxiliara al expresidente,
al cual, en sueños había visto en peligro.
Antes de embarcar
para América en enero de 1936, Margarita Xirgu se presentó todavía
varias veces ante del público badalonés en compañía
de Federico García Lorca, que más de un día y de dos se alojó
también, sobre todo en otoño de 1935, en la casa de delante del
mar. El 13 de octubre de 1935, el Orfeón Badalonés celebró
una velada selecta en homenaje a la Xirgu y a Lorca, en el qué hubo una
singular lectura de poemas: la actriz recitó "El año mil"
de Guimerà, el dramaturgo "Muerte de Antoñito el Camborio",
y Rivas Cherif "La vaca ciega" de Maragall. Los socios del Orfeón
Joan Rovira y Antoni Vives les entregaron un ramo de flores como muestra de agradecimiento.
El 14 de noviembre, la Compañía de Margarita Xirgu actuó
en el Teatro Cine Nuevo para dar a conocer "Yerma" de García
Lorca, dirigida por Cipriano de Rivas Cherif. Acabada la representación,
Margarita tomó parte también en un recital de poesías catalanas.

Margarita Xirgu y Federico García Lorca en Badalona


Programa
de "Yerma" del 14 de noviembre de 1935.
Foto
"Margarita Xirgu, cartografía de un mito. De Badalona en Punta Ballena"
de Francesc Foguet.






Recortes de prensa de octubre y noviembre de 1935
facilitados por Miquel Creixell Tramuns.
Tras presentarla en Mataró
y Sabadell, la Xirgu ofreció la pieza lorquiana "Doña Rosita
la soltera o el lenguaje de las flores", en el Nuevo de Badalona, el 9 de
enero de 1936. Según el testimonio de Margarita recogido por Carles Sentis
en "L'Instant" el 14 de enero, <<el todo Badalona era a la sala.
Los fabricantes de perfumes y del famoso anís, y el pescador con la blusa
de invierno de los días de fiesta. A todos los hizo llorar su Margarita
(los hombres, utilizando el pañuelo, hicieron ver que estaban enfriados),
interpretando un papel en el cual el poeta García Lorca se complació
en acumular todas las desdichas y todas las maldiciones>>. Un vez acabada
la función, <<en el escenario frío, pequeño y apretado
de sillas dispersas>>, Margarita Xirgu fue encajando las manos de <<una
cola de convecinos que iban pasando por delante de ella, en fila como si despidieran
un luto>>. Esta representación fue la última que daría
en Badalona.
Como vecina de Badalona y jefe de casa, Margarita
Xirgu representada por su hermano Miquel, presentó, con fecha del 30 de
abril de 1936, una hoja de inscripción en el Padrón General de Habitantes
de Badalona, en el que ya figuraba su sobrino Miguel, de 3 años que era
el único de la familia que, como es natural, aún no sabía
leer.
El texto
ha sido extraído de: "Margarida Xirgu, cartografia d'un mite. De Badalona
a Punta Ballena" de Francesc Foguet i Boreu
XAVIER RIUS XIRGU
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